
Extraer una pequeña cantidad de gel con las manos secas y aplicarlo en la cara y delicadamente en el contorno de ojos. Masajear la piel con pequeños movimientos circulares: el gel se transforma en un aceite suave y delicado que permite eliminar de forma eficaz por afinidad impurezas y residuos de maquillaje. Completar la limpieza enjuagando la cara con agua tibia: el aceite se transforma en una leche blanca que deja la piel suave y aterciopelada.Evitar el contacto con los ojos